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Que pasa si tienes deuda con endesa

Quién es el responsable de las facturas impagadas de la luz

Un hombre afectado por la amenaza de cortar la luz cree que Endesa debe asumir la deuda “Debemos poder vivir con dignidad, con electricidad y sin miedo”, dice José Luis JacasJosé Luis Jacas sostiene una de sus facturas impagadas (Blanca Blay/ACN) / ACNshareACN | BarcelonaPrimera publicación: 8 de septiembre de 2019 08:42 PMJosé Luis Jacas, uno de los afectados por la amenaza de Endesa de cortar la luz en los hogares de las familias endeudadas el 1 de octubre si la mitad de sus facturas siguen sin ser pagadas por los ayuntamientos de toda Cataluña, cree que la compañía debería asumir la deuda en su totalidad.

“Deberíamos poder vivir con dignidad, con electricidad y sin miedo”, dice Jacas, que ya sabe lo que es vivir sin ella, ya que pasó casi todo 2014 con ella cortada por la compañía, que le preocupa que vuelva a hacerlo.

Jacas, de 66 años, debe actualmente unos 750 euros en facturas impagadas y no ha podido pagar sus servicios en casi dos años. Perdió su trabajo hace casi diez años y, al no poder encontrar uno nuevo, ha luchado por cubrir sus necesidades básicas con los 400 euros que recibe de ayuda mensual.

Si un inquilino se va y deja una deuda pendiente, ¿qué debe hacer el propietario del inmueble? Lo principal es comprobar el nombre del titular del contrato, ya que éste es el responsable de las deudas.

Es aconsejable que la persona que disfruta del servicio sea el titular del contrato. En otras palabras: si las cosas se hicieran correctamente, el contrato de electricidad no estaría a nombre de Antonio, sino a nombre de su inquilino.

Sin duda, Antonio encontrará nuevos inquilinos. ¿Qué deben hacer? Cambiar el nombre del titular del contrato para que se haga responsable de las facturas. La primera de ellas se calculará a prorrata, por lo que sólo pagarán lo que hayan utilizado.

Ser el titular del contrato no sólo significa pagar por lo que usan (lo cual es justo). Al convertirse en titulares del contrato, los inquilinos tendrán acceso a toda la información que necesiten para saber cuánta electricidad están consumiendo cada hora de cada día.

Los mercados energéticos europeos siguen siendo uno de los principales temas de debate y reuniones políticas, industriales y financieras. Los precios de los productos energéticos están aumentando debido a la disminución de las reservas y los países emergentes como China e India están impulsando un crecimiento constante de la demanda mundial. La combinación de energías adecuada para las empresas de servicios públicos es cada vez más importante, así como las inversiones en una energía “más limpia” debido a cuestiones ecológicas[1].

Para una empresa de servicios públicos es esencial tener una posición poderosa para asegurar estas cuestiones de suministro a corto y largo plazo. Esta es quizá una de las razones de la próxima consolidación del mercado energético. E.ON también intenta jugar a este juego. Sus objetivos estratégicos y financieros a través de la fusión con Endesa son crear la primera empresa mundial de electricidad y gas y, por tanto, una mayor presencia en el mercado europeo y americano, así como crear un valor financiero avanzado para los accionistas[2].

En general, para las fusiones es importante que tanto los inversores en acciones como los directivos de las empresas que pretenden realizar adquisiciones, necesiten saber cuánto vale una empresa y cuánto están dispuestos a pagar por su inversión. Por ello, los autores exponen los antecedentes teóricos de la valoración de empresas y muestran cómo pueden utilizarse diferentes técnicas de valoración en distintos contextos. Como en toda adquisición, por un lado el posible comprador debe tener siempre presente que: “El precio es lo que se paga, el valor es lo que se obtiene”[3]. Por otro lado también es importante tener en cuenta que: “Una cosa vale lo que el comprador pagará por ella”[4] Son dos afirmaciones que también son importantes al lado de los valores de la empresa valorados.