Etapas Aml
Pitufos – Un método popular utilizado para blanquear dinero en efectivo en la etapa de colocación. Esta técnica implica el uso de muchos individuos (los “pitufos”) que cambian los fondos ilícitos (en cantidades más pequeñas y menos llamativas) por artículos de gran liquidez, como cheques de viaje, giros bancarios, o depositados directamente en cuentas de ahorro. Estos instrumentos se entregan al blanqueador, que comienza entonces la etapa de colocación.
La etapa de colocación representa la entrada inicial del efectivo “sucio” o del producto del delito en el sistema financiero. Por lo general, esta etapa tiene dos propósitos: (a) libera al delincuente de retener y custodiar grandes cantidades de dinero en efectivo; y (b) coloca el dinero en el sistema financiero legítimo. Es durante la fase de colocación cuando los blanqueadores de capitales son más vulnerables a ser descubiertos. Esto se debe a que la colocación de grandes cantidades de dinero (en efectivo) en el sistema financiero legítimo puede levantar las sospechas de los funcionarios.
La colocación del producto del delito puede hacerse de varias maneras. Por ejemplo, se puede meter el dinero en efectivo en una maleta y pasarlo de contrabando a un país, o el blanqueador puede utilizar pitufos para eludir las leyes sobre los umbrales de declaración y evitar las sospechas. Otros métodos habituales son:
2. Blanqueo de activos. En esta circunstancia, un blanqueador de dinero puede utilizar el dinero ilegítimo para comprar activos, por ejemplo, artículos de gran valor, como obras de arte. Luego, en una fecha posterior, el blanqueador revenderá el artículo a cambio de dinero en efectivo o de una transferencia bancaria a través de una subasta.
3. Blanqueo comercial. En este caso se trata de directores de empresas legítimas que falsifican facturas para mover dinero ilegítimo. Para los bancos y la Agencia Tributaria, es imposible reconocer que este dinero es ilegítimo, ya que aparecen como transacciones comerciales legítimas junto a los ingresos comerciales reales.
Hoy en día, se han introducido controles contra el blanqueo de capitales en muchas empresas para evitar que se produzca este fenómeno. Por ejemplo, se han establecido normas para reducir las posibilidades de comprar propiedades con dinero en efectivo.
Una acusación de blanqueo de capitales puede conllevar largas penas de prisión y multas ilimitadas. Por lo tanto, encargar a un abogado de defensa penal que lleve correctamente su caso puede minimizar las posibles penas.
Esta es la segunda etapa en la que se oculta el origen de los fondos moviéndolos en una serie de complejas transferencias bancarias o transacciones financieras. De las diversas técnicas de estratificación, la más común es realizar transferencias electrónicas entre diferentes jurisdicciones y a través de cuentas en paraísos fiscales. Por ejemplo, el delincuente puede transferir las ganancias a una sociedad en una isla de ultramar donde el rastro del dinero no termina porque la misma sociedad puede ser propiedad de un fideicomiso en otra isla.
¿Qué es la estratificación? La estratificación en el blanqueo de capitales se define como el proceso de utilizar capas de transacciones o múltiples instrumentos financieros para reforzar el aspecto legítimo del dinero procedente del delito. Una vez que el producto del delito ha entrado en el sistema financiero, y sus orígenes se separan de la fuente delictiva, entonces los fondos se mueven, se dispersan y se disfrazan para disminuir la sospecha o evitar la detección por parte de las fuerzas del orden. Los fondos se dividen en transacciones más pequeñas y se transfieren al extranjero para mantener el dinero en movimiento a nivel internacional y evitar que las autoridades puedan rastrear las finanzas con facilidad. Dado que el dinero se transfiere electrónicamente, resulta aún más fácil comerciar con él en el extranjero. En los últimos tiempos, los blanqueadores de dinero pueden utilizar los ingresos para comerciar con diversas acciones en el extranjero en varios mercados, ocultar la transferencia como un pago por bienes/servicios o transferir los fondos a una empresa fantasma.